8/10/08

SOBRE LA INSTALACION DE SUPERMERCADOS



UNA DISCUSIÓN ESTÉRIL

La discusión que se esta dando referida a la instalación de nuevas superficies comerciales en la ciudad y la artillería de argumentos leguleyos, fundamentalmente centrada en el “índice de saturación” es una nueva prueba de la falta de sintonía con la gente de que adolecen nuestros representantes.
Así vemos a los concejales enfrascados en interminables discusiones con el Departamento Ejecutivo referidas a las condiciones a imponer para la habilitación de estos emprendimientos.
Pese a la existencia de un crítico dictamen de la Secretaría Legal y Técnica respecto de la aplicación del coeficiente de saturación -cuestionando la legalidad y la razonabilidad de la medida- igualmente los bloques de la oposición se alinearon para sostenerlo sin dedicarle demasiado espacio a las razones legales por las que, el área jurídica de la comuna, puso en duda la viabilidad de la medida.
El coeficiente de saturación es un índice que resulta de dividir a la cantidad de habitantes del distrito por 8, estableciendo el total de metros cuadrados habilitables para todos los mini, máxi, súper e hipermercados que funcionen en locales superiores a los 191 metros cuadrados. De este modo, se crea un "cupo" total de superficie para desarrollar la actividad válido en el partido, por lo que, una vez que se alcance esa cifra, no podrían habilitarse nuevos establecimientos, generando un paraguas protector sobre el comercio ya instalado.
En nuestra opinión nos parece que se está perdiendo el eje de la cuestión al montarse en una discusión fuera de foco, en torno a la radicación de grandes superficies comerciales, mercados o hípermercados. El Departamento Ejecutivo se está enroscando demasiado en argumentos legales. No se trata de cercar a Mar del Plata no permitiendo la instalación de cadenas internacionales, sino de hacerlo RACIONALMENTE y teniendo en cuenta las características económicas propias de la ciudad y su actual conformación y sobre todo el valor agregado que aportarían estos comercios en generación de mano de obra no volátil y, obviamente el dinero que dejarían en la ciudad más allá de los salarios y que serviría para mover la rueda del comercio en otras áreas ( servicios-insumos-equipamiento ) por que no debemos dejar de considerar que este tipo de comercio que pertenece a grandes cadenas de capitales foráneos se provee en otros lugares ajenos a la ciudad.
Es un dato de la realidad que en nuestra ciudad existe una sobre oferta comercial traducida en miles de comercios, shopings, súper e hipermercados de diferente origen en donde al comerciante marplatense, sobre todo al pequeño, le toca la peor parte. Lo que no existe, o en el mejor de los casos es absolutamente deficitaria, es una oferta industrial de la misma magnitud y no sujeta a variables como la estacionalidad o el recurso.
Mar del Plata y sus comerciantes se han preparado para atender una demanda temporal de millones de personas que llegan en época veraniega, cada ves mas limitada por diversos factores, que de cuatro meses de verano a pasado a dos . En el resto del año el comercio local debe subsistir en medio de una competencia con una oferta que supera con creces una demanda sensiblemente disminuida en una ciudad con uno de los índices de desocupación más altos de país e indisimulables franjas de pobreza e indigencia.
Es por ello que sostenemos que la discusión sobre la habilitación o no de estos emprendimientos se debe basar en la cantidad de puestos industriales que generen como valor agregado y la efectiva reinversión de recursos en el mercado local NO SOLAMENTE EN PUESTOS DE TRABAJO DIRECTAMENTE AFECTADOS AL OBJETO COMERCIAL.
Esta es una variable, que obligatoriamente se debe tener en cuenta, a la hora de legislar en una comuna de compleja situación social. Es precisamente una razón excluyente, en la que deben intervenir los concejales.
El impacto de una desregulación sin equidad, que no tenga en cuenta al universo de comerciantes de la ciudad que también sostienen con muchísimo esfuerzo fuentes de trabajo, sería un golpe mortal, de cara al futuro, para la ciudad. SI ATAMOS ESTAS HABILITACIONES A EMPRENDIMIENTOS que generen inversiones MAS PERMANENTES SEGURAMENTE OTRA SERIA LA HISTORIA. Habría que ver si la clase política marplatense está en condiciones de dar este debate haciéndolo por convicción y con cabal conocimiento de la realidad local.
Es imprescindible poner un algo grado de racionalidad en esta discusión para que sea la última vez que se de, dejando de lado argumentos políticos y ocasionales oposiciones sacándola del contexto coyuntural convirtiendo esta en una buena ocasión para redefinir el perfil económico de nuestra ciudad.
Es un tema en que evidentemente falta decisión política, hablarle claro al vecino dejar de bombardearlo con datos provenientes de ignotas y desconocidas ong que casualmente arriban a la ciudad para defender a estos emprendimientos comerciales solo en función de generar más competencia, y poner reglas ABSOLUTAMENTE claras para su habilitación.

JULIO P.LOBATO
Presidente
Junta Directiva
Unión Renovadora Independiente

No hay comentarios: