
El "modelo productivo" estalla por el sector automotor
El sector industrial con mayor incorporación de tecnología, con los trabajadores más capacitados y mejor pagos, acaba de estallar. La Política Online lo había anticipado pese al enojo de empresarios y funcionarios. Las suspensiones y despidos ya son imparables. Plantas paralizadas, caída de ventas y cero financiamiento. Más de 5000 trabajadores recorren el centro porteño ¿Qué más falta para que reaccione Hugo Moyano?
El famoso “modelo productivo” de los Kirchner, siempre se afianzó sobre tres patas: la construcción, la obra pública y el sector automotriz. Todo financiado con el dinero que el campo inyectaba en la economía. Bueno, el sector automotor acaba de entrar formalmente en crisis, con la impresionante marcha de unos 5000 trabajadores de Smata que hoy traumatizaron el centro porteño.
La Política Online viene anticipando los conflictos en este sector que vive una altísima tasa de suspensiones y plantas paradas, que empresarios y funcionarios se empeñan torpemente en tapar. “Lo que le molesta a los Kirchner no es que la gente se quede sin trabajo, sino que salga en los medios”, se sinceró frente a este portal un ejecutivo del sector.
Pero claro. Miles de mecánicos y trabajadores de Smata marchando por el centro ya no se puede tapar. La crisis llegó y por más que Guillermo Moreno dibuje las estadísticas de empleo y crecimiento, la sensación de la calle dice una cosa muy distinta y eso en último término es lo único que importa en términos políticos.
Se trata de un golpe durísimo para el “modelo” que los Kirchner proclamaron durante estos años, que merecería pronunciamientos inmediatos de la UIA y la CGT.
De los empresarios ya no hay mucho mas para decir, cuando han permitido que se destruya el entorno de negocios del país, con una actitud pusilánime pocas veces vista.
Lo que si llama la atención es la extrema prudencia de Hugo Moyano. Pero a no engañarse, cuando el agua le llegue a la cintura, va a reaccionar. “Hugo no se va a suicidar, cuando la crisis económica se convierta en social, terminó su apoyo a los Kirchner”, anticipó a La Política Online un allegado al sindicalista, que ya demostró un olfato político muy sofisticado, oculto convenientemente detrás de sus modales rudos.
Con fórceps
En este marco, el gobierno sigue entretenido con la fiebre, en vez de atacar las causas de la enfermedad que afecta a la economía. Así, hoy los funcionarios celebraban que la totalidad de los trabajadores de planta permanente y contratados de la empresa General Motors (GM), incluidos los 436 operarios que habían recibidos los telegramas de despido días atrás, ingresaron hoy a la planta industrial, ubicada en la localidad santafesina de Alvear.
Apenas un anuncio de corto plazo para los medios, ya que esta tarde continuarán las negociaciones en el marco de la conciliación obligatoria dispuesta por el Ministerio de Trabajo de Santa Fe, entre la empresa y Smata.
Para mayor claridad, la empresa les asignó a los trabajadores tareas de “capacitación”. O sea, la planta sigue parada.
El famoso “modelo productivo” de los Kirchner, siempre se afianzó sobre tres patas: la construcción, la obra pública y el sector automotriz. Todo financiado con el dinero que el campo inyectaba en la economía. Bueno, el sector automotor acaba de entrar formalmente en crisis, con la impresionante marcha de unos 5000 trabajadores de Smata que hoy traumatizaron el centro porteño.
La Política Online viene anticipando los conflictos en este sector que vive una altísima tasa de suspensiones y plantas paradas, que empresarios y funcionarios se empeñan torpemente en tapar. “Lo que le molesta a los Kirchner no es que la gente se quede sin trabajo, sino que salga en los medios”, se sinceró frente a este portal un ejecutivo del sector.
Pero claro. Miles de mecánicos y trabajadores de Smata marchando por el centro ya no se puede tapar. La crisis llegó y por más que Guillermo Moreno dibuje las estadísticas de empleo y crecimiento, la sensación de la calle dice una cosa muy distinta y eso en último término es lo único que importa en términos políticos.
Se trata de un golpe durísimo para el “modelo” que los Kirchner proclamaron durante estos años, que merecería pronunciamientos inmediatos de la UIA y la CGT.
De los empresarios ya no hay mucho mas para decir, cuando han permitido que se destruya el entorno de negocios del país, con una actitud pusilánime pocas veces vista.
Lo que si llama la atención es la extrema prudencia de Hugo Moyano. Pero a no engañarse, cuando el agua le llegue a la cintura, va a reaccionar. “Hugo no se va a suicidar, cuando la crisis económica se convierta en social, terminó su apoyo a los Kirchner”, anticipó a La Política Online un allegado al sindicalista, que ya demostró un olfato político muy sofisticado, oculto convenientemente detrás de sus modales rudos.
Con fórceps
En este marco, el gobierno sigue entretenido con la fiebre, en vez de atacar las causas de la enfermedad que afecta a la economía. Así, hoy los funcionarios celebraban que la totalidad de los trabajadores de planta permanente y contratados de la empresa General Motors (GM), incluidos los 436 operarios que habían recibidos los telegramas de despido días atrás, ingresaron hoy a la planta industrial, ubicada en la localidad santafesina de Alvear.
Apenas un anuncio de corto plazo para los medios, ya que esta tarde continuarán las negociaciones en el marco de la conciliación obligatoria dispuesta por el Ministerio de Trabajo de Santa Fe, entre la empresa y Smata.
Para mayor claridad, la empresa les asignó a los trabajadores tareas de “capacitación”. O sea, la planta sigue parada.
Fuente: La Politica On Line
No hay comentarios:
Publicar un comentario