La clave es la “descacharrización”
Autor/a : Daniela Aruj
Parece que hoy la clave para impedir que el Dengue se siga propagando esta dada por la descacharrización, entendemos por tal a la eliminación de “cacharros”, léase utensillos, baldes, bidones y contenedores de agua donde se reproduce el Aedes Aegipty, vector propagador del Dengue.
Parece que hoy la clave para impedir que el Dengue se siga propagando esta dada por la descacharrización, entendemos por tal a la eliminación de “cacharros”, léase utensillos, baldes, bidones y contenedores de agua donde se reproduce el Aedes Aegipty, vector propagador del Dengue.
Esto que hoy cuanto menos suena a poco, a solución parcial, hace un año cuando el frío había eliminado al mosquito y a la enfermedad, era una herramienta esencial como prevención y precaución a un brote. Hoy inmersos en una epidemia es tarde.
Pero esta solución no es tan simple, primero hay que explicarse la existencia de los tan mentados cacharros. Simplemente gran parte de la existencia de cacharros en la zona donde comenzó a propagarse la enfermedad se explica en la falta de redes de agua corriente. Las fuentes de agua potable, pozos, canillas, etc. se encuentran a metros o kilómetros y el agua es trasladada a diario en esos cacharros.
Es por ello que la epidemia tiene responsables, tiene “dueños” y son los gobernadores que en épocas de campaña presentan proyectos del tenor del e-govermment que suena muy bien pero que en nada representa a sus futuros representados. Y es claro que en los lugares donde no hay algo tan elemental como el agua potable tampoco hay una cantidad de habitantes / votantes que “justifique” dicha inversión por lo que resulta más fácil prometer a la mayoría y privar de dignidad a la minoría.
Sin dudas imagino lloverán las demandas por mal desempeño de sus funciones a la Ministra de Salud, mi colega contadora Ocaña, o Licenciada en Arte o en Ciencias Políticas y a todos y cada uno de los gobernadores y Ministros de Salud provinciales que no solo no gobiernan para su pueblo, sino que se han constituido en legítimos padres del Dengue al ni siquiera intentar llevar agua corriente a sus ciudadanos, fumigar con insecticidas vencidos, ocultar los casos, permitir su propagación y no declarar la emergencia nacional.
A todos ellos que Dios, la Patria y el Pueblo se los demanden.
Cra. Daniela Aruj
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