11/4/09

LA PROBLEMÁTICA SOCIAL Y LA INSEGURIDAD

Problemática social:


Madre y cuna de la inseguridad que padecemos y que comienza a resolverse ¿en el cuarto oscuro?
Autora: Dra. Norma Daddato Regner

Tocando un poco la problemática social podemos decir que al momento no se ha encontrado la forma de lograr la integración ó inclusión de aquellos marginados, en forma genérica e integral, a lo que podríamos llamar “circulo social y productivo del país”. Podemos denominar “circulo social y productivo del país” a aquel grupo humano integrado por quienes desde su nacimiento han gozado de un buen sistema educativo, un buen plan de cobertura de salud y/o sanitario, una buena y completa educación, un trabajo digno y bien remunerado o remunerado en forma satisfactoria para poder cubrir las necesidades básicas de cada integrante de la familia, y que llegando al final de sus días pueda gozar de un retiro, pensión o jubilación por la labor desarrollada que le permita cubrir todas sus necesidades, o al menos cubrir con amplitud y holgura sus necesidades básicas.-

Cuando logramos cerrar el círculo de la vida que va desde el nacimiento hasta la muerte del individuo que ha vivido una vida tranquila, con sus necesidades cubiertas por el fruto del trabajo de sus padres cuando niño, el fruto de su propio trabajo cuando adulto capaz de sostener y mantener su propia familia, y el fruto de su jubilación cuando anciano ó adulto mayor, podemos decir que se ha logrado integrar, incluir en forma definitiva a un individuo al “circulo social y productivo del país”.-

Lamentablemente hoy en día la desocupación, la pobreza, la miseria, etc., han logrado que muchos se encuentren excluidos durante toda su vida o parte de la misma de dicho círculo.-

Nos encontramos con la desnutrición infantil que esta matando según las últimas estadísticas a 8 niños por día en nuestro país. Pero la desnutrición también ataca a nuestros adultos mayores que por falta de recursos no pueden cubrir sus necesidades alimenticias básicas.-

Pero no solo tenemos a la desnutrición que mata, tenemos también la desnutrición que enferma y mantiene en vilo a una gran franja de la sociedad excluida de ese “circulo social y productivo del país”.-

¿Quién no ha visto las campañas que dicen que “el hambre es un crimen”? Pero el mayor desafío que debemos enfrentar no es el hambre. El hambre puede ser combatido conformado o complacido con cualquier cosa que se ingiera, hasta con polenta, arroz y fideos todos los días. El hambre puede ser saciado, pero el peor desafío que se presenta es la desnutrición, la carencia de micro-nutrientes (vitaminas, minerales y aminoácidos esenciales) que ya no permiten al organismo asegurar el crecimiento y el mantenimiento de sus funciones vitales. Ya no es un problema de cantidad de alimentos, como sería “el hambre”, ahora hablamos de un problema de “calidad” de los mismos.-

Las secuelas que provoca en un individuo haber padecido desnutrición infantil lo marcan para toda la vida. Producen un retraso en el crecimiento físico é intelectual, disminuyen las defensas inmunitarias y son fuente de enfermedades infecciosas. La desnutrición causa estragos en la población.-

Entonces ¿qué nos deja como consecuencia la desnutrición infantil cuando no lleva a la muerte del pequeño? Cuerpos pequeños, que no alcanzan a desarrollarse plenamente, chicos que se duermen en las clases, cerebros agotados para pensar aún antes de comenzar a hacerlo, jóvenes sin desarrollo intelectual y con escaso vocabulario, indefensos ante cualquier enfermedad, proclives a contraer una hepatitis B y/o cualquier enfermedad infecto-contagiosa que cualquier otro que no ha padecido de desnutrición seguramente no la contraería. Además estos chicos se crían en un ambiente hostil, en una familia, donde el ejercicio de la prostitución es una de las formas de subsistir y llevar dinero al hogar. No solo la ejerce la madre sino también caen en ella las hermanas, sin importar la edad de las mismas.-

Familias que no pueden cumplir la función básica de educación del pequeño y que el Estado no se encarga de brindarla plenamente ejerciendo un control permanente sobre dicha familia y la educación y necesidades de los integrantes de la misma.-

Y la historia vuelve a repetirse en la siguiente generación, con el agravante que existen más placebos, sustitutos momentáneos de la felicidad. De esa felicidad que no logran alcanzar por no tener una guía en el hogar y lo básico para la subsistencia y porque allí tampoco la conocieron ú encontraron. Entre esos placebos encontramos una pastilla de PACO por dos pesos o un tetrabrick por similar valor. Ya no importan las consecuencias que ese momento de evasión de su triste realidad pueda acarrearle. Y no les importa porque saben que su futuro va a ser el mismo que el de sus padres, hermanas y tíos. Para ellos su propia vida no vale nada ¿Cómo podemos pretender que aprecien el valor de una vida cuando vivieron ajenos al cumplimiento de sus necesidades básicas, mínimas y vitales durante muchos años de su existencia por parte del Estado y ellos para el Estado no fueron importantes? Salvar las vidas, el futuro de estos chicos para nuestro Estado no ha sido importante durante décadas.-

Esos niños, luego jóvenes, cuando se les pregunta por su expectativa de vida, consideran que la misma se agota alrededor de los 30 años en el mejor de los casos, y muchas veces antes de llegar a esa edad. Se consideran a si mismos como jóvenes sin futuro, sin posibilidades de crecimiento económico, sin puertas abiertas para poder escapar de esa situación en la que han vivido toda su vida, sin medios para poder salir de la pobreza, del abandono, de la marginación. Son jóvenes sin ilusiones, y lo más triste, sin esperanzas de poder cambiar su destino. Si no los mata el hambre o una enfermedad, se matan entre ellos, entre pandillas, o pueden morir mientras cometen un hecho delictivo. Pero igualmente, aún sin darse esas situaciones, saben que están muertos para la sociedad.-

Se hace imperiosamente necesario modificar esa realidad social é incluir a esta amplia franja de la sociedad dentro del “círculo social y productivo del país”. Se torna indispensable mejorar la educación, la salud, el empleo y la equidad para esta parte de la población.-

Todo esto conlleva a que cada vez los delincuentes sean más jóvenes y la violencia empleada por los mismos sea mayor y cada vez más desmedida en relación a la defensa que la mayoría de las veces ofrecen sus víctimas. Desgraciadamente están descargando en sus víctimas toda esa impotencia y abandono sufrido desde que eran muy pequeños. Todo esto se lo debemos en gran parte a las actitudes abandónicas del Estado.-

Es ilógico pretender que un municipio asuma toda la responsabilidad que acarrea este gran problema social que debe ser tratado indefectiblemente con la participación conjunta de la Nación, la Provincia y el propio Municipio.-

Y mucho más ilógico es pretender buscar en el Ministerio de Seguridad la solución integral al flagelo de la inseguridad ¿Qué puede hacer dicho ministerio para mejorar la salud, crear fuentes de empleo, asegurar una buena y completa educación gratuita para la población, y promover la justicia y equidad para todos los habitantes? La respuesta a este gran interrogante es: NADA. Absolutamente NADA de esto que hace al incremento de la inseguridad nuestra de cada día es competencia EXCLUSIVA del Ministerio de Seguridad. Lo único que podría y DEBERÍA hacer al respecto el Ministerio de Seguridad, además de ocuparse de los temas inherentes a su cartera, sería RECLAMAR A LOS EJECUTIVOS NACIONAL, PROVINCIAL Y MUNICIPAL QUE DICTEN LAS POLITICAS DE GOBIERNO ADECUADAS, las famosas políticas de estado inexistentes en nuestro país desde hace ¿décadas?.-

También le corresponde a ese Ministerio ocuparse del FACTOR HUMANO de la seguridad. Tiene la OBLIGACION de proveerles los chalecos antibala reglamentarios y EVITAR que los efectivos usen chalecos vencidos. Tiene la OBLIGACIÓN de gestionar sueldos dignos, superiores a los que cobra una empleada doméstica por hora. Poner el cuerpo y arriesgar la vida para combatir a la delincuencia DEBE Y TIENE que ser considerada una tarea riesgosa y como tal debe ser remunerada. No puede ser más remunerativo limpiar una casa o cocinar que salir a enfrentarse con los delincuentes con la posibilidad de perder la vida reprimiendo un hecho ilícito.-

Otra de las tareas de las que debe ocuparse el Ministerio de Seguridad es la de actualizar al personal en lo que respecta al armamento que utilizan para combatir la delincuencia. No puede ni debe ser posible que los que caminan al costado de la ley, los que se roban nuestras vidas, cuenten con armas de última generación y excelente calidad, y nuestros efectivos policiales no puedan superarlos ni en cantidad ni en calidad de las mismas.-

La seguridad integral que tanto deseamos y necesitamos no se logra cambiando las figuritas de lugar. No sirve reemplazar a un Jefe Departamental por otro. Vamos a cambiar veinte veces de Jefe Departamental y nos van a seguir matando, nos van a seguir robando y se van a seguir burlando de todos y cada uno de nuestros derechos.-

El cambio no debe efectivizarse en las distintas Jefaturas viendo que comisionado puede estar y desempeñarse mejor en un lugar ú en otro. El cambio necesario debe ser puesto en práctica en las políticas de estado adecuadas para promover a la inclusión social.-

El cambio puede y DEBE efectuarse en el cuarto oscuro al momento de elegir a nuestros representantes. Los mayores responsables de proveernos una mejor y mayor seguridad son ellos.-

Los distintos ejecutivos DIGITAN a los responsables de cada ministerio. Si no nos gusta como se desempeña un ministro, o no lo consideramos idóneo para ocupar ese despacho, la culpa es pura y exclusiva del ejecutivo nacional o provincial que allí lo puso.-

En la provincia de Buenos Aires todos nos quejamos de la gestión del ex ministro de seguridad León Arslanian mientras estaba ocupando ese ministerio. Pero el único responsable de esa destructiva gestión no es Arslanian. Debemos ver quién lo puso y quién lo sostuvo en el cargo. Algún gobernador lo designo para ocupar ese puesto, y hubo otro gobernador que lo siguió manteniendo en su cargo hasta no hace mucho tiempo atrás. Y hay otro gobernador que aún sigue aplicando su plan de lucha contra la inseguridad, al menos así surge de la página web del ministerio donde al buscar el plan de seguridad actual aparece un decreto firmado por Felipe Sola y León Arslanian.-

Esas malas elecciones de nuestros ejecutivos (nacional, provincial y municipal) en los responsables a cargo de las distintas carteras de gobierno hacen y sustentan a la inseguridad nuestra de cada día. Nuestros ministros con su accionar coadyuvan a que no se dicten ni apliquen las políticas de estado necesarias.-

No creamos los marplatenses que por tener 250 efectivos federales va a mejorar nuestra situación. Esto es solo un antitérmico ante un pico de fiebre. Con estos efectivos no vamos a combatir el foco infeccioso y los picos de fiebre van a ser cada vez de temperaturas más elevadas. Y tampoco cambiando de Jefe Departamental vamos paliar el flagelo de la inseguridad.-

De nosotros depende continuar o no con esta situación. De nosotros depende que se apliquen las políticas de estado necesarias. De nosotros depende que sigan en sus puestos aquellos que consideran que la INSEGURIDAD ES UNA SENSACION. De nosotros depende que un ministro que demostró que las medidas por él aplicadas no sirven para disminuir la delincuencia y que por el contrario fue aumentada, siga ocupando ese puesto.-

Exijamos, reclamemos a nuestros gobernantes que pongan gente adecuada en los ministerios y secretarías. Ahora, en las próximas elecciones, tenemos oportunidad de manifestarles que su gestión no nos gusta, que su gestión no nos sirve, que en su gestión nos siguen matando, nos siguen robando. Si queremos un cambio debemos tener en cuenta que en el cuarto oscuro ayudamos a que el mismo se produzca.-


Dra. Norma D´Addato Regner


No hay comentarios: