PATOVICAS

Sólo el 5 % de los 40 mil patovicas que vigilan la noche bonaerense está en blanco

Un ejército de casi 40.000 hombres embadurnados en gel, con músculos rígidos e inflados, y estricta fajina negra, se ocupa de darle seguridad, puertas a dentro, a la noche bonaerense.Hay 17 por boliche y 4 por bar.

El Estado abrió el registro y quiere regularizar la situación. Un ejército de casi 40.000 hombres embadurnados en gel, con músculos rígidos e inflados, y estricta fajina negra, se ocupa de darle seguridad, puertas a dentro, a la noche bonaerense. Son unos 17 por boliche, calculan. El número no es menor si se tiene en cuenta que la Policía provincial cuenta con 55.000 efectivos, incluyendo a los efectivos de oficina.

El cálculo se desprende de un estimativo de cantidad de locales bailables habilitados, que son 1.198 y más de 8.000 bares. Según explicó Leandro Nazarre, titular del Sindicato Único de Trabajadores de Control de Admisión y Permanencia de la Republica Argentina (SUTCAPRA), se calcula que cada disco cuenta con unos 17 empleados de seguridad, mientras que hay 3 ó 4 en por cada bar.

El sindicato representa a los trabajadores de control de admisión y permanencia de público en general en lugares de entretenimiento como bares, estadios, clubes, pubs, discotecas, restaurantes; aunque la cantidad de afiliados es irrisoria en todo el país y apenas el 5% estaría registrado en blanco.

En las inspecciones realizadas por el ministerio de Trabajo bonaerense durante este año, no se encontró ni un solo empleado de seguridad en blanco. Y no sólo se inspeccionaron los boliches. En los últimos conciertos de La Renga o Los Piojos tampoco había trabajadores registrados, por cuya labor los empleadores pagaran la jubilación y las cargas sociales que corresponden.

"En 2005 hicimos un relevamiento en el que registramos a 338 trabajadores de los cuales apenas 8 estaban en blanco. El sueldo promedio en aquel momento era de 37 pesos por noche. Y la cosa no cambió tanto", reveló Nazarre.

NUEVAS REGLAS.

El registro abierto por la Provincia la semana pasada para la actividad de los controladores de admisión y permanencia obligará a los trabajadores a capacitarse para ejercer el oficio, pero, además, servirá para regularizar su situación de dependencia.

Buenos Aires adhirió a fines del año anterior a la ley nacional 26.370 (de mayo de 2008), y desde marzo trabajó en la redacción del decreto reglamentario, consensuando el contenido con los sectores del gobierno involucrados en la temática por la ley (Seguridad, Trabajo, Educación y Derechos Humanos), y el SUTCAPRA.La asociación civil Martín Castellucci, que recuerda al joven que murió asesinado por un patovica de la disco La Casona de Lanús, el 3 de diciembre de 2006, a los 20 años, participó de la creación del nuevo registro. Y destacó que se trata de "una herramienta de suma utilidad para la transformación de una parte de esa realidad tan compleja de la nocturnidad", del que salió el Curso de Formación Profesional que deberá certificar la idoneidad de los controladores de admisión y permanencia.Los cursos, que comenzarán en septiembre, están basados en una experiencia piloto que se realizó en Lanús, Quilmes y La Plata.

En esa última ciudad, con la participación de 70 trabajadores."Hubo una alta participación en los cursos preparatorios, que no eran oficiales, lo que indica que hay una preocupación por los compañeros y una necesidad de contar con herramientas para hacer mejor su trabajo", aseguró Nazarre.

A ESTUDIAR.

El curso oficial que deberán hacer los patovicas para poder trabajar tendrá 240 horas de cursada y estará dividido en seis módulos. El primero será sobre contextualización y contempla temáticas como Derechos Humanos y derecho procesal y penal, además de las obligaciones del trabajador, conocimientos de comunicación no violenta y técnicas de negociación.

Asimismo, se enseñará primeros auxilios, se tratará la prevención de agresiones físicas, entre las que, por ejemplo, se enseñan llaves y trabas para reducir a los posibles agresores sin provocar lesiones.Los controladores tambien contarán con cursos de seguridad antisiniestro y catástrofes