Las encuestas que llegaron ayer a Olivos pueden ser las claves para la definición.
Los últimos sondeos no le dan bien a Néstor Kirchner. El ex presidente rondaría los 34 puntos y se habría estancado, ante el permanente crecimiento de Francisco De Narváez y Felipe Solá, que llegarían casi a 29 puntos. Atentos a esto, el Frente para la Victoria elaboró un plan "B" y también un plan "C".
La idea de que Daniel Scioli termine encabezando la lista peronista oficial no suena para nada descabellada. Sin embargo, hay quienes se oponen por la falta de legitimidad que tendría la terna al estar encabezada por un candidato que no asumiría como diputado y seguiría siendo gobernador.
Para que Scioli sea candidato a primer diputado nacional, debería bajarse a Néstor Kirchner del hasta ahora indiscutido encabezamiento. Para eso hay dos planes: excluirlo directamente o presentarlo como candidato forzando una posible impugnación a su candidatura por no cumplir con el domicilio electoral. La primera alternativa ofusca a los ultra kirchneristas ya que lo ven como un fracaso de su líder político. La segunda opción, en cambio, gusta mucho más porque Kirchner aparecería como “proscripto” por la Justicia electoral y la oposición.
Según versiones de fuentes oficiales, también estarían definidos el segundo y el tercer lugar de la lista, en caso de que el gobernador Scioli quede al frente. Sergio Massa tendría el puesto 2 y para eso debería renunciar a la jefatura de Gabinete y Alicia Kirchner el número 3, renunciando para ello al ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
Por lo que los tres planes que se manejan hoy son los siguientes: a) Kirchner – Scioli; b)Kirchner – Scioli – Massa (impugnación de Kirchner, quedando Scioli – Massa); c)Scioli – Massa directamente.
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