Mediocre Imágen de la Nueva Política
Las elecciones legislativas viven una campaña poco común, donde predomina lo mediático y las frases rimbombantes a la presentación de proyectos y modelos de país. Por qué las campañas han perdido el prestigio de antaño y las actitudes de cada partido ante esta situación
La Argentina asiste a una de las campañas más pobres o la más pobre desde comienzos de la democracia.
Así y todo, las convocatorias siguen siendo exiguas, como le pasó a la presidenta Cristina Fernández en Santa Cruz cuando hace poco fue a apoyar los candidatos santacruceños.
Desde Unión PRO se basa todo en una campaña mediática, sobre todo televisiva, donde se quiere enmarcar la buena gestión que representan dos empresarios unidos en un mismo proyecto, tales son los casos de Francisco de Narváez y Mauricio Macri, dejando de lado otra etiqueta y recorriendo los barrios tan preparadamente, que todo no pasa más que una buena campaña publicitaria donde se vea a los candidatos sonrientes junto a la gente necesitada.
La oposición tampoco va en saga, con algunos retoques sugeridos por mediocres publicistas, llevan a que la campaña termine desparramada en el living de el programa de Marcelo Tinelli "Gran cuñado",o sea que la ciudadanía asiste inerte a la oferta ya no a través siquiera de un spot publicitario, que ya es un nivel bajo, nivel que no permite la construcción de verdaderos dirigentes sino de productos de marketing en base a slogans, carentes de profundidad o de algún gesto que marque aunque sea una pequeña luz en el horizonte, teniendo la oposición vasto campo de desarrollo
Las elecciones legislativas viven una campaña poco común, donde predomina lo mediático y las frases rimbombantes a la presentación de proyectos y modelos de país. Por qué las campañas han perdido el prestigio de antaño y las actitudes de cada partido ante esta situación
La Argentina asiste a una de las campañas más pobres o la más pobre desde comienzos de la democracia.
La misma es tan paupérrima, que a lo máximo que se aspira es a redondear una foto que refleje en un instante, el supuesto apoyo popular, la educación de la gente que participa, demostrar que prima la racionalidad, y todo ello haciendo siempre hincapié en frases como el "soy un hombre común" de De Narváez, cuando un hombre "común" no presenta una declaración jurada de ocho cifras al igual que el candidato oficialista, el ex presidente Néstor Kirchner.
El núcleo gobernante presenta sus candidatos en auditorios donde parece que todos fueran ciudadanos educados, gente que no pasa privaciones y que apoya a rajatabla el "modelo" oficialista.
En la trastienda de estos actos se da cuenta que las convocatorias no cuentan en gran parte con gente que llega por "motus propio", sino que es llevada en contingentes de micros anaranjados (micros escolares), por supuesto con el estipendio correspondiente más algún refrigerio por las horas que la persona tiene que estar fuera de su casa.
Así y todo, las convocatorias siguen siendo exiguas, como le pasó a la presidenta Cristina Fernández en Santa Cruz cuando hace poco fue a apoyar los candidatos santacruceños.
En la provincia sureña se realizó el evento en el Cepard, que es el Centro para Actividades Deportivas de Alto Rendimiento, y no en el tradicional Boxing Club, debido a que en este ultimo entran algo más de seis mil personas y en el primero la módica cantidad de mil a mil doscientas personas.
Desde Unión PRO se basa todo en una campaña mediática, sobre todo televisiva, donde se quiere enmarcar la buena gestión que representan dos empresarios unidos en un mismo proyecto, tales son los casos de Francisco de Narváez y Mauricio Macri, dejando de lado otra etiqueta y recorriendo los barrios tan preparadamente, que todo no pasa más que una buena campaña publicitaria donde se vea a los candidatos sonrientes junto a la gente necesitada.
El Acuerdo Cívico y Social no se queda atrás, y lejos quedaron las palabras de Elisa Carrió cuando decía que ellos habían venido a cambiar la política y hacer una política nueva sin nada de lo viejo. La realidad volvió a chocar con las palabras de la chaqueña, y en los últimos actos se ha visto actuar al viejo aparato de la Unión Cívica Radical, con toda la parafernalia partidaria que suelen despedir los militantes en estos actos.
La ausencia de una verdadera política testimonial y de compromiso con la ciudadanía, provoca esta verdadera caída en picada de la oferta electoral, y por lo tanto lo único que se pretende al menos es tener una "postal" que sirva para suplir el vacío dirigencial.
La oposición tampoco va en saga, con algunos retoques sugeridos por mediocres publicistas, llevan a que la campaña termine desparramada en el living de el programa de Marcelo Tinelli "Gran cuñado",o sea que la ciudadanía asiste inerte a la oferta ya no a través siquiera de un spot publicitario, que ya es un nivel bajo, nivel que no permite la construcción de verdaderos dirigentes sino de productos de marketing en base a slogans, carentes de profundidad o de algún gesto que marque aunque sea una pequeña luz en el horizonte, teniendo la oposición vasto campo de desarrollo
Fuente: Agencia CNA
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