Nace el Pankirchnerismo
Decidido a que todos estén adentro, el ex presidente impulsa la renovación del oficialismo con figuras ajenas al PJ y los piqueteros.
La pregunta obvia:
El intendente marplatense PULTI, el kirchnerista testimonial ( y culposo ) del 2009 ... como jugará en esta partida ??
La alianza entre Ricardo Alfonsín y Elisa Carrió ya es prácticamente una fórmula presidencial que deberá competir en la interna abierta del Acuerdo Cívico y Social si Julio Cobos persiste. Pero lo concreto es que el Panradicalismo se está instalando firmemente y sólo falta, para completar el cuadro, la incorporación de Ricardo López Murphy, que obviamente no es del agrado de Alfonsín. Frente al renacimiento radical y a la posibilidad de que el Peronismo Federal tome vuelo en una serie de provincias, Néstor Kirchner está forjando una nueva criatura política: el Pankirchnerismo. El viernes pasado se presentaron en Mar del Plata, como la corriente renovadora del kirchnerismo, Amado Boudou, el titular del ANSES, Diego Bossio, el Secretario de la Jefatura de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina y el Secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino. La presidente del BCRA, Mercedes Marco del Pont también se sumaría a esta lista, de la que podrían surgir, por ejemplo, los candidatos a Jefe de Gobierno porteño y Vicegobernador de Buenos Aires.
La semana anterior, Kirchner recuperó para su causa al ubicuo intendente de Tigre, Sergio Massa, y también le habría levantado la excomunión a Pablo Bruera, lord mayor de La Plata. Esta nueva rama de kirchneristas heterodoxos podría incluir a un grupo numeroso de diputados provinciales. Y hasta el propio presidente de la Cámara, Horacio González, se anotaría en este sector.
Otra ramificación K es la que brota por el lado de Juan José Álvarez ( el gran traidor quien supo ser el mentor del grupo "El General" y "armador" - o destructor - de la estructura de Francisco de Narvaez en el 2007 y del Macrismo en el 2009 ) cuyo trabajo es recuperar para Olivos a dirigentes del Peronismo Federal y reciclar figuras de derecha. El ex jefe político de Álvarez, Aldo Rico ya está preparándose para volver a la intendencia de San Miguel envuelto en la bandera del oficialismo.
Pero el frenesí de lanzamientos no se detiene. El próximo martes, en un acto en el Teatro Coliseo, se fundará la Corriente de Liberación e Integración Nacional (Colina) y su referente máxima, nada menos que la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, y el armado de la flamante estructura estará a cargo de Carlos Castagnetto, Secretario de Coordinación y Monitoreo Institucional del Ministerio de Desarrollo Social y uno de los organizadores de la jornada.
A todo esto, Kirchner no descuida su relación con el Sub 45, conformado hace un mes en Salta por su gobernador, Juan Manuel Urtubey, que gusta de aparecer como un disidente pero se sube con facilidad a los aviones presidenciales, como por ejemplo, en el reciente periplo a Canadá. Por este grupo circula el Ministro de Espacio Público, Diego Santilli, al que se lo menciona como un potencial migrante hacia las filas del kirchnerismo, donde tiene puestas sus simpatías su mujer, Nancy Pazos.
Un armado complejo
La semana anterior, Kirchner recuperó para su causa al ubicuo intendente de Tigre, Sergio Massa, y también le habría levantado la excomunión a Pablo Bruera, lord mayor de La Plata. Esta nueva rama de kirchneristas heterodoxos podría incluir a un grupo numeroso de diputados provinciales. Y hasta el propio presidente de la Cámara, Horacio González, se anotaría en este sector.
Otra ramificación K es la que brota por el lado de Juan José Álvarez ( el gran traidor quien supo ser el mentor del grupo "El General" y "armador" - o destructor - de la estructura de Francisco de Narvaez en el 2007 y del Macrismo en el 2009 ) cuyo trabajo es recuperar para Olivos a dirigentes del Peronismo Federal y reciclar figuras de derecha. El ex jefe político de Álvarez, Aldo Rico ya está preparándose para volver a la intendencia de San Miguel envuelto en la bandera del oficialismo.
Pero el frenesí de lanzamientos no se detiene. El próximo martes, en un acto en el Teatro Coliseo, se fundará la Corriente de Liberación e Integración Nacional (Colina) y su referente máxima, nada menos que la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, y el armado de la flamante estructura estará a cargo de Carlos Castagnetto, Secretario de Coordinación y Monitoreo Institucional del Ministerio de Desarrollo Social y uno de los organizadores de la jornada.
A todo esto, Kirchner no descuida su relación con el Sub 45, conformado hace un mes en Salta por su gobernador, Juan Manuel Urtubey, que gusta de aparecer como un disidente pero se sube con facilidad a los aviones presidenciales, como por ejemplo, en el reciente periplo a Canadá. Por este grupo circula el Ministro de Espacio Público, Diego Santilli, al que se lo menciona como un potencial migrante hacia las filas del kirchnerismo, donde tiene puestas sus simpatías su mujer, Nancy Pazos.
Un armado complejo
Hasta ahora, Kirchner se movía a caballo de dos estructuras, el aparato del PJ y los movimientos piqueteros. Hoy está girando hacia otra lógica. Quiere contar con múltiples grupos que ensanchen su universo político y que le sirvan para acotar a las estructuras tradicionales. Con el correr del tiempo y con las encuestas no demasiado optimistas sobre su candidatura, el ex presidente temería que los caudillos provinciales empiecen a ponerse exigentes y a hablar en voz alta de desdoblar las elecciones provinciales de las nacionales, debilitando a la Casa Rosada. Un esquema oficialista más diversificado y complejo serviría para contenerlos. La idea es que todos estén adentro -incluso los disidentes-, pero dispersos y controlables. El flamante Pankirchnerismo también apuntaría a prevenir un paso al costado de Daniel Scioli, que no habla pero dedicaría buena parte de su tiempo a hacer cálculos. Por ejemplo, si podrá ser reelecto si Kirchner es candidato a presidente. O una incertidumbre peor: ¿Qué hará si su jefe lo convoca otra vez para que sea su vice?
El aluvión de caras juveniles que Kirchner quiere incorporar a su foto tiene asimismo otros dos perjudicados. Se trata de Hugo Moyano y Luis D’Elía, considerados impresentables para la próxima campaña electoral según el dictamen unánime de los consultores del gobierno. Herido porque el ex presidente ya acordó con los intendentes que el PJ bonaerense lo gerenciarán ellos, Hugo Moyano siente que su desplazamiento puede ser el prólogo de cosas aún peores que le esperan en el Juzgado Federal de Claudio Bonadío. Repudiado por la clase media, D’Elía, por su parte, sabe que el gobierno no le dará ningún papel estelar en el 2011.
Una receta de los 70
El aluvión de caras juveniles que Kirchner quiere incorporar a su foto tiene asimismo otros dos perjudicados. Se trata de Hugo Moyano y Luis D’Elía, considerados impresentables para la próxima campaña electoral según el dictamen unánime de los consultores del gobierno. Herido porque el ex presidente ya acordó con los intendentes que el PJ bonaerense lo gerenciarán ellos, Hugo Moyano siente que su desplazamiento puede ser el prólogo de cosas aún peores que le esperan en el Juzgado Federal de Claudio Bonadío. Repudiado por la clase media, D’Elía, por su parte, sabe que el gobierno no le dará ningún papel estelar en el 2011.
Una receta de los 70
El recambio por caras jóvenes y con aire de nueva política es un recurso que Juan Domingo Perón utilizó a principios de los 70 como una forma de captar a los sectores de clase media reacios al peronismo tradicional.
En aquella época, el debate era en torno al trasvasamiento generacional y tenía un alto contenido ideológico.
Kirchner imita ahora superficialmente aquella operación, intentando recuperar espacio en los grandes centros urbanos, mediante figuras que sugieren cambios y nuevos rumbos. Scioli, Moyano y algunos gobernadores ya se están dando por aludidos.
Autor: Carlos Tortora
Fuente: Informador Publico
Fuente: Informador Publico
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