POLÍTICA - ERAMOS POCOS Y .....

Se armó la interna Duhalde-De narvaez

La agencia estatal de noticias Télam decidió inmiscuirse en probables diferencias entre los de Francisco de Narváez, los de Eduardo Duhalde y alguna otra gente que apareció en escena...

Si algo le faltaba a los domingos periodísticos en los que desde hace un par de semanas sobrevuela el olor a operación, es que la agencia Télam se hiciera eco de las declaraciones que enfrentan a Francisco De Narváez con Eduardo Duhalde.

El sábado 10/04, Duhalde había bajado la guardia y dado a entender que “todo era posible”, dando por sentado que no descarta la posibilidad de una nueva alianza entre el Colorado y él, con miras a 2011.

“En 2099 trabajé codo a codo” para el armado de Unión-Pro había reconocido el caudillo de Lomas, y a decir verdad, quienes estuvieron cerca de ese entorno saben que aún cuando se lo negaba públicamente porque temían que su nombre fuera “piantavotos”, la estructura partidaria que le permitió a De Narváez tener armado en todos los distritos y cuidar los votos en las urnas para que el número final del escrutinio lo diera ganador, en principio, la aportó el duhaldismo.
Pero apenas horas después, la puerta que abrió Duhalde la cerró de un golpe el diputado nacional y mano derecha de De Narváez, Gustavo Ferrari.

Para Ferrari, “Duhalde es lo viejo y no hay ninguna posibilidad de un acuerdo con él”.

Es más, sostiene que “Duhalde no puede atribuirse haber trabajado codo a codo con nosotros cuando desde hace tiempo viene militando en contra de Francisco (De Narváez), hasta le entregó el partido a (Luis) Patti para sacarnos votos”.Y lo paradójico es que eso también es cierto.
En el último tramo de la campaña de 2009, cuando ya Narváez lideraba las encuestas y el armado territorial respondía (porque además les gusta apostar a ganador), el último empujón lo dio el propio kirchnerismo que puso el dedo acusador sobre Narváez y lo definió como el “adversario a derribar”, lo que potenció que el voto “en contra de”, se dirigiera hacia De Narváez, sumando así, electorado independiente y gran cantidad de indecisos.

En este segmento, Duhalde no mide bien, y quedaba mejor hacer creer no sólo que ya no estaba apoyando a los 3 mosqueteros (Mauricio Macri, Francisco De Narváez y Felipe Solá), sino que además, nunca había participado del armado que logró torcerle el brazo a Néstor Kirchner en la provincia de Buenos Aires.

Cuando no sólo se lo negó públicamente sino que también el diálogo fue esporádico y tirante, Duhalde fogoneó la candidatura de Luis Patti, a través del dirigente oriundo de Las Flores y eterno 'delfín' duhaldista, Daniel 'Chicho' Basile, con intención de restarle algunos puntos en territorio bonaerense.

De ahí en más, cada uno organizó sus propias aspiraciones para 2011, y se chocaron nuevamente cuando De Narváez empezó a coquetear con llegar a la Corte Suprema de justicia para que lo habilite en una posible candidatura presidencial.

La semana pasada, no obstante, esto quedó en el plano de lo hipotético, y aunque podría tener una presentación judicial, le aseguró a sus legisladores que trabajará para convertirse en el sucesor de Daniel Scioli en la gobernación bonaerense, algo que anunció públicamente el titular del bloque de Diputados de Unión Pro en la provincia, Ramiro Gutiérrez, un hombre del interior bonaerense, muy ligado a De Narváez.

Pero la pelea de titanes entusiasma al kirchnerismo que los prefiere enfrentados y no compitiendo juntos contra el Frente para la Victoria.

Será por eso que para la agencia oficial Telam, que jamás publica nada ni de los diputados nacionales opositores ni de los ex presidentes que no se llamen Kirchner o que por sus actos, sean funcionales al apellido con K, esta vez, apareció la opinión de la ex legisladora Marina Cassese.

“Decir que el liderazgo lo ganó Unión PRO -sin Eduardo Duhalde- no resiste un archivo, ya que Eduardo Duhalde participó de la campaña de Francisco De Narváez en 2009”, aseguró Cassese.
Para la diputada mandato cumplido, “Ferrari es un irrespetuoso por decir que Duhalde es lo viejo, cuando, por ejemplo, el presidente más añoso de la región es José Mujica (de Uruguay), y nadie puede decir que sea lo viejo”.

“Hay que ver los archivos para acordarse de que Duhalde y De Narváez estuvieron juntos en septiembre de 2008 en el Parque Industrial La Cantábrica -en Morón-, y luego, (Hilda) Chiche Duhalde lo estuvo acompañando por toda la provincia de Buenos Aires”, le recordó Cassese a Telam.

Y por si le faltaban más datos, recordó nombre ligados al duhaldismo que formaron parte de las listas que encabezó De Narváez, como Alfredo Atanasof, Eduardo Amadeo o la esposa de Osvaldo Mércuri. “Si ellos no son el peronismo, ¿el peronismo dónde está?”, se preguntó Cassese.

Debe recordarse que cuando apoyaba a Roberto Lavagna como el futuro de la política argentina, Cassese estuvo cerca de Narváez.

“Es una pena que De Narváez tenga esta gente que lo rodea, que son más papistas que el Papa y son discriminatorios”, aseguró la ex diputada en referencia a Ferrari.

Lo que se preguntan muchos dirigentes hoy, es si la sangre llegará al río; si las peleas son parte de una pulseada en la que De Narváez aún limitando sus pretensiones al territorio bonaerense se envalentona porque sabe que cualquier candidato a presidente que quiera ganar necesita sí o sí, un candidato a gobernador que tracciones votos.

Por otro lado, Duhalde habrá creído que tendría de nuevo la posibilidad de liderar el armado tripartito, basándose en quienes le aseguran que en las últimas encuestas su nivel mejora en algo, y que las de De Narváez lanzado a la nación, no arrojarían los números que esperaban encontrar.

Lo cierto es que ante este panorama de oposición fragmentada, el oficialismo, una vez más, siente que todavía quedan razones para considerar que no está muerto quien pelea, y espera a ver si además, es posible reír último.

Autor: Silvana Varela