Inflación: la espina en el zapato K
La sociedad sigue rechazando las políticas implementadas por el Poder Ejecutivo para frenar la suba de los precios. Cerca del sesenta por ciento cree que el gobierno no hace nada por solucionarla. Sólo un tercio está conforme con las medidas implementadas, el mismo porcentaje de intención de voto que tiene CFK
La sociedad sigue rechazando las políticas implementadas por el Poder Ejecutivo para frenar la suba de los precios. Cerca del sesenta por ciento cree que el gobierno no hace nada por solucionarla. Sólo un tercio está conforme con las medidas implementadas, el mismo porcentaje de intención de voto que tiene CFKA pesar del discurso progresista y lleno de felicidad que viene proclamando el oficialismo desde su llegada al poder en el año 2003, la realidad muestra que para los argentinos la inflación es uno de los temas que más le preocupan y que por el momento no hacen más que brillar por su ausencia las posibles soluciones al mismo por parte de las autoridades correspondientes.
El desinterés por el funcionamiento del Indec que trae aparejado la decisión de darle la responsabilidad del mismo a Guillermo Moreno, ha hecho que en la Argentina al no tener datos reales la manifiesta aplicación de un singular método para medir las principales cuestiones económicas del país, hay una completa desinformación e incredulidad sobre el aumento que han tenido los precios a lo largo de este tiempo. Esto existe porque no son reales los precios que marca el Indec, que dice que en los últimos dos años subieron un 10%.
La inflación, tan negada por el gobierno, sigue siendo un tema que preocupa y mucho a los argentinos. Así lo revela un informe realizado por el portal el informador público, que utiliza como base encuestas de Hugo Haime & Asociados, en el que muestra la desconfianza de la población con la administración de CFK en esta materia.
Según la publicación, cerca del sesenta por ciento de los encuestados cree que el Frente Para la Victoria no está haciendo nada para combatir la suba de precios. Si bien bajo diez puntos la desconfianza en los últimos cuatro meses, está lejos de contar con el aval de la gente: sólo el treinta por ciento cree que se está trabajando para combatir este flagelo.
El pico máximo de rechazo se había dado en abril del año pasado, cuando tres cuartos de la población sostuvo que el gobierno no trabajaba en pos de solucionar el problema inflacionario. En los últimos tres meses, la opinión de la gente se mantuvo en los mismos índices, ya sea de rechazo como de apoyo a la gestión presidencial en materia de medidas anti-inflacionarias.
El dato saliente es que, en un contexto donde el aumento de precios está en los primeros lugares entre los problemas que afectan a la vida cotidiana, seis de cada diez – el 59 por ciento- entrevistados siguen considerando que el Gobierno Nacional no está tomando medidas para combatirlo y apenas tres – el 30 por ciento- piensan que si lo hace.
El desinterés por el funcionamiento del Indec que trae aparejado la decisión de darle la responsabilidad del mismo a Guillermo Moreno, ha hecho que en la Argentina al no tener datos reales la manifiesta aplicación de un singular método para medir las principales cuestiones económicas del país, hay una completa desinformación e incredulidad sobre el aumento que han tenido los precios a lo largo de este tiempo. Esto existe porque no son reales los precios que marca el Indec, que dice que en los últimos dos años subieron un 10%.
La inflación, tan negada por el gobierno, sigue siendo un tema que preocupa y mucho a los argentinos. Así lo revela un informe realizado por el portal el informador público, que utiliza como base encuestas de Hugo Haime & Asociados, en el que muestra la desconfianza de la población con la administración de CFK en esta materia.
Según la publicación, cerca del sesenta por ciento de los encuestados cree que el Frente Para la Victoria no está haciendo nada para combatir la suba de precios. Si bien bajo diez puntos la desconfianza en los últimos cuatro meses, está lejos de contar con el aval de la gente: sólo el treinta por ciento cree que se está trabajando para combatir este flagelo.
El pico máximo de rechazo se había dado en abril del año pasado, cuando tres cuartos de la población sostuvo que el gobierno no trabajaba en pos de solucionar el problema inflacionario. En los últimos tres meses, la opinión de la gente se mantuvo en los mismos índices, ya sea de rechazo como de apoyo a la gestión presidencial en materia de medidas anti-inflacionarias.
El dato saliente es que, en un contexto donde el aumento de precios está en los primeros lugares entre los problemas que afectan a la vida cotidiana, seis de cada diez – el 59 por ciento- entrevistados siguen considerando que el Gobierno Nacional no está tomando medidas para combatirlo y apenas tres – el 30 por ciento- piensan que si lo hace.
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